Gotas de Sabiduría.
“Es
preferible seguir en soledad hasta que llegue alguien que realmente complemente
nuestra vida, de tal forma que sea mucho mejor que estar solo. Si no es así, no
vale la pena.”
“Así como
las relaciones necesitan tiempo para tornarse fuertes, tú también necesitas
tiempo, para ser una mejor persona.”
(Fuente:
Internet)
EL TREN DE LA VIDA
La vida
se asemeja a un viaje en tren. Con sus estaciones y cambios de vía, algunos
accidentes, sorpresas agradables en algunos casos, y profundas tristezas en
otros.
Al nacer,
nos subimos al tren y nos encontramos con nuestros padres, creemos que siempre
viajarán a nuestro lado. Pero en alguna
estación ellos se bajarán dejándonos seguir el viaje, de pronto nos
encontraremos sin su compañía y su amor irreemplazable...
No
obstante, muchas otras personas que nos serán muy especiales y significativas,
se irán subiendo al tren de nuestra vida, nuestros hermanos, amigos y en algún
momento, el amor de nuestra vida...
Algunos
tomarán el tren, para realizar un simple paseo. Otros durante su viaje pasarán
por momentos de oscuridad y tristeza. Y siempre encontraremos quienes estén
dispuestos ayudar a los más necesitados.
Muchos al
bajar, dejan un vacío permanente. Otros pasan tan desapercibidos que ni
siquiera nos damos cuenta que desocuparon sus asientos...
Es
curioso ver como algunos pasajeros, aún los seres queridos, se acomodan en
coches distintos al nuestro. Durante todo el trayecto están separados, sin que
exista ninguna comunicación.
Pero en
realidad, nada nos impide que nos acerquemos a ellos si existe buena voluntad
de nuestra parte. De lo contrario, puede
ser tarde y encontraremos a otra persona en su lugar.
El viaje
continúa, lleno de desafíos, sueños, fantasías, alegrías, tristezas, esperas y
despedidas...
Tratemos
de tener una buena relación con todos los pasajeros, buscando en cada uno, lo
mejor que tengan para ofrecer. En algún momento del trayecto, ellos podrán
titubear y probablemente precisaremos entenderlos, pero recordemos que nosotros
también, muchas veces, titubeamos y necesitamos a alguien que nos comprenda.
El gran
misterio para todos, es que no sabremos jamás en qué estación nos toca bajar.
Como tampoco dónde bajarán nuestros compañeros de viaje, ni siquiera el que
está sentado a nuestro lado.
A veces
pienso en el momento en el que me toque bajar del tren. ¿Sentiré nostalgia,
temor, alegría, angustia...? Separarme
de los amigos que hice en el viaje, será doloroso y dejar que mis hijos sigan
solos, será muy triste. Pero me aferro a la esperanza de que en algún momento,
tendré la gran emoción de verlos llegar a la estación principal con un equipaje
que no tenían cuando iniciaron su viaje.
Lo que me
hará feliz, será pensar que colaboré para que ellos crecieran y permanecieran
en este tren hasta la estación final.
Amigos,
hagamos que nuestro viaje en este tren tenga significado, que haya valido la
pena.
Vivamos
de manera que cuando llegue el momento de desembarcar, nuestro asiento vacío,
deje lindos recuerdos a los que continúan viajando en el Tren de la Vida.
Feliz
viaje...
Tenemos
infinidad de relaciones en nuestra vida. La primera de ellas comienza con
nuestros padres, o las personas que nos crían, que normalmente son familiares
cercanos. Luego de eso comienza a aparecer otra parte de nuestro grupo familiar
integrado por nuestros hermanos, tíos, abuelos, etc., que forman parte del
clan. Conforme vamos creciendo aparecen los maestros, profesores, que nos guían
a lo largo de nuestro aprendizaje, nuestros amigos que elegimos libremente, y
que vamos creciendo con ellos estableciendo relaciones cortas, o en algunos
casos a muy largo plazo, y en algún momento aparece una relación que cambia y
marca nuestra forma de ver el mundo y es nuestra pareja. Una de las relaciones
más importantes y significativas en nuestra vida es la relación de pareja, y
las consecuencias que se derivan de ella. Algunas buenas y otras no tan buenas.
En
cualquier caso, toda relación en nuestra vida se establece con algún objetivo
de aprendizaje, lo sepamos o no, lo entendamos o no. En nuestro desarrollo vamos adquiriendo
deseos, que luego plasmamos en distintos tipos de experiencias. Las relaciones
en general, son parte de esos deseos que se convierten en experiencias. Ya sean
familiares, de pareja, de amistad, de trabajo, etc. Usamos la proyección, y
ellas son el instrumento sobre las cuales proyectamos aquello que queremos
aprender. En cualquier caso, cada una de esas experiencias aparece para nuestra
expansión, para el crecimiento de nuestro Ser. Quizás, nuestros lectores pueden
confirmarnos si es cierto o falso que somos unos, antes de comenzar la
relación, cualquiera que ella sea, y otros, completamente diferentes, cuando terminamos
la misma.
En
cualquier caso, toda relación nos lleva a la expansión de nuestro SER. Y por
eso, es importante, que descubramos quienes somos, y que desarrollemos aquellas
habilidades que necesitamos para interactuar en el mundo.
En cualquier caso, disfrutemos la vida,
aprovechemos el viaje en el Tren de la Vida, disfrutemos el paisaje, mientras
dura el viaje.
Para finalizar, del Libro: El increíble poder de
las Emociones – Esther y Jerry Hicks:
“Me encanta estar contigo y en este momento me
siento de maravilla a tu lado. Por cierto, soy responsable en todo momento de
mis propios sentimientos. Pase lo que pase, tengo el poder de dirigir mis
pensamientos para sintonizar con quien-soy-realmente y sentirme bien. Así que
eres libre de vivir tu vida como te apetezca, porque yo estaré bien. Me gusta
mucho estar contigo, vivir contigo y amarte, pero mi felicidad es cosa
mía. ”
Mi
felicidad o mi infelicidad, son mi decisión.
Nadie puede hacerme feliz, sino yo mismo. Es mi responsabilidad. Asumo ese
compromiso, conmigo mismo.
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